Una alimentación sana significa también preocuparse por nuestro modo y estilo de vida que llevamos día con día, como la actividad física que realizamos, el sueño que logramos obtener al descansar y nuestros estados de ánimo, las semillas feminizadas de cannabis nos ayudan a combatir los estados de ánimo o emociones como lo son la ansiedad, ya que se considera también que la comida se consume muchas de las ocasiones en gran cantidad por el estado de ánimo que presentamos, aunque se dice que es un placer momentáneo o incluso para algunos una recompensa. Por eso centrarse en una dieta “prescrita” es contraproducente. Como prueba, las dietas restrictivas que a largo plazo provocan aumento de peso y que hoy están prohibidas. Los trastornos alimentarios y otros excesos de peso pueden estar relacionados con dificultades para gestionar las emociones, una baja autoestima y hábitos alimentarios nocivos. Aprendemos a comprender mejor los alimentos, nuestras enfermedades, a gestionar nuestras emociones, nuestros impulsos y a saborear para recuperar poco a poco una relación sana con la comida. Tomemos en cuenta los hábitos de la persona, su contexto de vida y sus obligaciones para que nuestros consejos puedan ser aplicables a largo plazo.
Nutrición personalizada.
La ingesta de alimentos puede tener efectos muy variados de un individuo a otro, probablemente cada uno tenga necesidades muy diferentes, ya que nuestras insuficiencias energéticas están determinadas en gran medida por factores individuales como el gasto energético, pero también por la edad, el sexo y el metabolismo que tenemos. ¿Y si mañana la ciencia de la nutrición se personaliza? La nutrigenómica, que se centra en los vínculos entre nutrición y genética desde una perspectiva preventiva y terapéutica, ya existe y está en pleno desarrollo. Esto permitirá que la ciencia esté cada vez más interesada en las propiedades terapéuticas de los alimentos y en la búsqueda de alimentos funcionales. Hoy en día ya se da por sentado que los propios alimentos podrían influir en nuestro gasto energético, ya sea reduciéndolo o incrementándose. No hay duda de que la industria alimentaria hará lo mismo para ofrecer a los consumidores alimentos destinados a solucionar sus problemas de salud.
Beneficios de los hábitos alimentarios saludables
Elegir alimentos sanos nos ayuda a desarrollar hábitos alimentarios saludables. Los hábitos alimentarios saludables pueden mejorar nuestra salud en general en cada uno de los aspectos. El término «hábitos dietéticos» se refiere a lo que se come y bebe regularmente. Como parte de unos hábitos alimentarios saludables, todos los alimentos y bebidas trabajan juntos para ayudarnos a: Mantenernos saludables, sentirnos bien para satisfacer nuestras necesidades nutricionales y así muchos de estos hábitos alimentarios saludables han sido objeto de profundos estudios. Encontramos principalmente opciones de alimentos de origen vegetal.
El consumo regular de alimentos de origen vegetal nos permite consumir más fibra y menos grasas saturadas. Esto puede tener efectos beneficiosos para la salud, por ejemplo: reduciendo los riesgos de cáncer, diabetes tipo 2, cardiopatía. La mayoría de los hábitos alimentarios saludables incluyen pocos alimentos altamente procesados, lo cual es de gran beneficio para nosotros.
¿Cómo desarrollar hábitos alimentarios saludables?
Podemos desarrollar hábitos alimenticios saludables como comer más verduras y frutas. Elegir variedades de cereales integrales en lugar de alimentos elaborados con cereales, como: pasta integral, pan de grano entero, copos de avena integrales o granos de avena, arroz integral o salvaje. Reemplazar los productos lácteos con alto contenido de grasas saturadas, sodio y azúcares por variedades más saludables, como: el yogur sin azúcar y bajo en grasa, quesos bajos en grasa y sodio, leche blanca baja en grasa y bebidas vegetales sin azúcar. Reemplazar carnes con alto contenido de grasas saturadas por variedades más magras, como: huevos, aves sin piel, pescado y mariscos. Reemplazar parte de la carne en sus comidas con alimentos proteicos de origen vegetal, como: Tofu, las nueces, semillas y legumbres.
Limitar los alimentos
Limitar los alimentos altamente procesados nos permitirá sentirnos más sanos en salud física, estos alimentos pueden ser: las conservas de mermeladas y jaleas, postres como los helados y chocolates, bocadillos salados, papas fritas, carnes procesadas abarcan el tocino y las salchichas, azúcares y jarabes como la miel y melaza, productos horneados como galletas y croissants, salsas, aderezos, bebidas azucaradas como jugo, café y té endulzados.
Los mejores hábitos alimentarios incluyen opciones de alimentos que combinen con nuestro gusto, el presupuesto y la cultura de cada uno, sin antes olvidarnos de cada estilo de vida que llevamos o nos gustaría llevar.
