La bancada de la oposición, con las siglas de Gana Medina y PSOE como protagonistas, inaugurarán las sesiones plenarias del año con tres mociones
De la Fuente-. Este mismo lunes, 29 de enero, se celebrará de manera excepcional el pleno ordinario de enero. Un traslado temporal -puesto que habitualmente se convocan los últimos jueves de mes- que vendría motivado por un evento vinculado al mundo de la patata que, justamente, se ha celebrado el pasado jueves. Pues bien, la oposición, y más concretamente Gana Medina, ya ha trasladado a los medios de comunicación la moción que elevarán a este órgano. En esta ocasión, el partido liderado por María Jesús Vázquez tratará de sumar los votos suficientes para aprobar su propuesta, que no es otra que la revisión de las ordenanzas y reglamentos municipales para adecuarlos a un lenguaje «no discriminatorio».
A lo largo de un total de cuatro puntos, Vázquez aboga por la revisión exhaustiva de estos documentos, «para adecuar su lenguaje a un uso no discriminatorio de personas con discapacidad, ya sea física o psíquica». También con el objetivo de que este lenguaje no sea sexista.
Por otro lado, la edil apuesta por la necesidad de actualizar este tipo de textos a «los tiempos presentes», al entender que algunos de ellos «han quedado completamente desactualizados». Y, finalmente, buscará el apoyo del resto de ediles del pleno para que «todos los documentos futuros contemplen el uso de lenguaje igualitario, inclusivo y no sexista».
Por otro lado, y a través de rueda de prensa, los ediles Luis Manuel Pascual y Aída Escuredo explicaron sus mociones el pasado viernes a la población. La primera de ellas, vinculada a los problemas de personal y de las instalaciones de la Biblioteca Municipal: «Se está debilitando a pasos agigantados», garantizan. Así, pretenden que los presupuestos, que «van con retraso», tengan una partida específica para solventar estas circunstancias.
En cuanto a la despoblación, el PSOE ha redactado un decálogo un diez propuestas para tratar de evitar la pérdida poblacional. «El Ayuntamiento no está tomándoselo en serio», confirma el portavoz, Luis Manuel Pascual. Entre los puntos, se incluye el instar a la Junta de Castilla y León a declarar como zona de especial vulnerabilidad Medina del Campo y comarca, para que se hagan «políticas acordes» en términos de pérdidas de habitantes.
