La Consejería de Economía y Hacienda de Castilla y León ha anunciado la asignación de 9,85 millones de euros en deducciones fiscales, beneficiando a 11,847 familias de bajos recursos. La media de la devolución asciende a 831 euros por beneficiario, marcando un récord en el impulso de estas ayudas.
En el noveno año de la campaña, la Junta busca que aquellos ciudadanos que en años anteriores no aplicaron deducciones por falta de ingresos puedan disfrutar ahora de estos beneficios fiscales. El importe total de las deducciones se divide entre los beneficiarios, promediando los 831 euros por familia.
La Junta, comprometida con agilizar el proceso, ha realizado un primer abono parcial de 7,4 millones a 9,623 beneficiarios, el de mayor importe desde la implementación de estas ayudas. Este pago se completará en los próximos meses, conforme se verifiquen las solicitudes, siguiendo la normativa de resolver todas las peticiones antes de abril de 2024.
Desde 2011, la Junta ha permitido a los contribuyentes deducir ciertos gastos familiares del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRPF). La política de apoyo a familias, la conciliación y el reto demográfico ha llevado a un aumento constante en las ayudas pagadas, superando los 55 millones de euros para más de 75,000 beneficiarios en los últimos ocho años.
Las seis deducciones aplicables incluyen familia numerosa, nacimiento o adopción de hijos, partos múltiples o adopciones simultáneas, gastos de adopción, cuidado de hijos menores y permiso de paternidad. Estas medidas buscan favorecer a las familias más necesitadas y contribuir al bienestar económico en la región.
