La Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural anuncia un logro histórico: 9,810 agricultores y ganaderos de Castilla y León han formalizado préstamos bonificados por un valor de 410 millones de euros. Este respaldo financiero, destinado a hacer frente a la sequía, marca un hito en la región y supera seis veces la ayuda proporcionada en 2019.
La medida, parte del plan de choque de la Junta para combatir la sequía, cuenta con una aportación máxima de 60 millones de euros de la Consejería para bonificar los intereses de los préstamos. La colaboración con once entidades financieras, como Abanca, Banco Santander, BBVA, y otras, ha permitido implementar esta iniciativa de apoyo al sector agrario.
El éxito de las solicitudes ha sido notorio, con un aumento tanto en el número de solicitantes como en las cuantías con respecto a las ayudas similares de 2019. Los 60 millones de euros destinados a la bonificación de intereses representan un considerable incremento en comparación con la cuantía de 13 millones de euros en 2019.
Estas ayudas se suman a las diversas medidas implementadas por la Junta para respaldar al sector agrícola, incluyendo complementos a las indemnizaciones de Agroseguro, ayudas directas, reducciones fiscales y otras medidas estructurales, como el Plan de Balsas. En total, la inversión alcanza los 145 millones de euros de fondos propios.
