La llegada del LXXXVI Campeonato de España de Galgos en Campo a tierras castellano-leonesas resalta la conexión única entre la región y esta tradición arraigada.
La comunidad Castellano Leonesa se prepara para recibir el LXXXVI Campeonato de España de Galgos en Campo, marcando el vigésimo séptimo evento de este tipo celebrado en la región a lo largo de la historia. Un recorrido por los correderos que han sido testigos de estos campeonatos revela la arraigada tradición de este evento en tierras castellanas.
Salamanca y su imponente paisaje fueron testigos de los primeros compases de este apasionante evento, sentando las bases para futuras ediciones. El evento ha evolucionado a lo largo de los años, dejando una huella imborrable en Medina del Campo, que con sus nueve ocasiones de hospedar la competición, se convierte en un epicentro de emociones y rivalidades galgueras.
Madrigal de las Altas Torres, con su encanto rural, ha sido escenario de emocionantes enfrentamientos en siete ediciones, demostrando la versatilidad de los correderos castellanos. Nava del Rey, con su tercera ocasión como anfitriona en este 2024, sigue siendo un punto de encuentro para amantes de este deporte.
Desde las primeras ediciones, Salamanca ha sido anfitriona en dos ocasiones (1941 y 1950), seguida de Medina del Campo, que ostenta el récord con nueve eventos, tres en El Chucho (1975, 1976 y 1978) y seis en Virgen del Amparo (1988, 1991, 1997, 2001, 2003 y 2013). Matapozuelos ha albergado el campeonato en dos ocasiones (1985 y 1989), mientras que Ataquines y San Pablo tuvieron su turno en 1999.
Madrigal de las Altas Torres se ha destacado como escenario en siete ocasiones (1993, 1996, 2005, 2012, 2015, 2018 y 2020), Cantalapiedra en 2008 y Nava del Rey en tres ocasiones (2000, 2016, 2019, 2022 y el presente 2024).
Los correderos castellanos son conocidos por ser territorio femenino, ya que, de las veintiséis ediciones celebradas hasta el momento en la región, solo en tres ocasiones los machos se han llevado la Copa de S.M El Rey, con TURBO en 1991, CLAMORES en 2001 y RUBIO DE TRIKI en 2022. En las restantes veintitrés ocasiones, las hembras han alcanzado la gloria en las tierras castellano-leonesas.
La comunidad Castellano Leonesa se enorgullece de recibir nuevamente esta competición que fusiona la tradición con la pasión por los galgos en campo, recordando que cada edición no solo es una competición, sino un capítulo más en la rica historia de esta arraigada tradición.
