Pensiones
Parece que, tras muchos años de aspavientos de Gobiernos del PP que volvi? a introducir el tema de las pensiones en el debate pol?tico, el actual ejecutivo del PSOE, que preside Pedro Sánchez, sin ruidos ni alharacas procedi? ayer al pago del incremento de las mismas, dando as? cumplimiento al acuerdo alcanzado en el Congreso de los Diputados.
Pero, al margen del cumplimiento de un acuerdo parlamentario, todo apunta que el Pacto de Toledo, organismo encargado de vigilar la sostenibilidad de la pensiones y ninguneado durante años, tendr? que reunirse para estudiar con criterios técnicos y no pol?ticos el mantenimiento del Sistema público de Pensiones de Españaña.
Est? claro que con los actuales tipos de contratos precarios y de baja cotizaci?n, con las tarifas planas de Autónomos que no han dado el resultado apetecido y con las aportaciones de trabajadores y empresarios al sistema, el mismo no es capaz de autofinanciarse, entre otras cosas porque de la ?Caja Unica? se abonan mensualmente pensiones no contributivas que, a?n debiendo pagarse porque es de justicia, no deben salir de dicha caja com?n.
La soluci?n, que deber? acordarse necesariamente de forma discreta en el Pacto de Toledo, tiene que pasar por la obligatoriedad del Estado de asumir la aportaci?n necesaria al ?Sistema de Pensiones? para que el mismo sea sostenible, incluyendo tal tema en la propia Constituci?n.
En cuanto a la extracci?n de los recursos necesarios para tal fin, los mismos tienen que salir, necesariamente, de un sistema de fiscalidad diferente y progresivo, muy distinto del actual, encaminado a que pague más quien más ingresa y tiene, despejando la veleidad de los oportunistas liberales de bajar los impuestos e incluso de eliminar algunos de los mismos. Tales medidas deber?n complementarse con una reforma laboral que d? al traste con la picaresca que se genera en los contratos de trabajo temporales; una subida de salarios, para que el consumo interno sea capaz tirar de la econom?a; y, ni qu? decir tiene, adelgazar la Administraci?n y luchar a muerte contra el fraude fiscal, imponiendo tambi?n impuestos al sistema financiero que tantos millones de euros recibi?, y no ha devuelto, para su saneamiento en los primeros momentos de la crisis.
En definitiva y con todas las cautelas, el Pacto de Toledo, el Gobierno y el Parlamento, no estorbando ?ste en vez de auspiciar el normal funcionamiento de Españaña por intereses espurios y ?electoreros? de sus componentes, tienen trabajo por delante haciendo política de Estado que es la que los españoles esperan de sus representantes.
La Voz de Medina y Comarca