El tercer Batallón del Regimiento de Transmisiones 21, con base en Burgos, desarrolló una exhibición cinológica en el centro neurálgico de la Villa de las Ferias, con una gran afluencia de público
Paula de la Fuente
Aunque la programación oficial hacía alusión a las seis de la tarde, el ambiente en la Plaza Mayor de la Hispanidad se comenzó a palpar incluso una hora antes del inicio del evento. La expectación estaba servida, teniendo en cuenta que el tercer Batallón del Regimiento de Transmisiones 21, con base en Burgos, iba a culminar su estancia de ejercicios en Medina del Campo con una exhibición cinológica. De este modo, esta rama del Ejército de Tierra se despedía, de manera especial, de una población que, desde su llegada a comienzos de semana, ha recibido a más de 160 militares con cercanía y hospitalidad.
Y así, en la tarde de este jueves, centenares de medinenses de todas las edades se agolparon en la Plaza Mayor de la Hispanidad para ser testigos del evento. Una cita que arrancó con el izado de bandera por parte de uno de los propios canes que forman parte del equipo militar. A lo largo de la convocatoria, se mostraron las distintas habilidades de estos animales, como su capacitación para la detección de explosivos o sustancias estupefacientes.
Por si fuera poco, la unidad de Medina del Campo hizo un llamamiento a otras unidades del norte de España, con el objetivo de que presentaran al público una capacidad adicional que tiene el Ejército de Tierra, que es la de perros de seguridad y defensa. Entre aplausos, la ciudadanía admiró la disciplina de estos canes al servicio de la nación. Un papel importante lo jugaron los más pequeños de la villa, quienes no dudaron en pintarse la bandera de España en sus rostros y también colaboraron con el Ejército en una serie de juegos propuestos para la ocasión. A título de obsequio, la unidad repartió varias pulseras de España a multitud de niños y niñas asistentes.
Este 12 de abril los militares se despedirán de Medina del Campo, tras finalizar el considerado como ejercicio más importante del año, encuadrado en el Plan General de Instrucción y Adiestramiento. No obstante, la población ya se pregunta si, en un futuro no muy lejano, sería posible volver a contar con su asistencia y, en mejor medida, reactivar así el funcionamiento del Cuartel Marqués de la Ensenada.
Jjajaja… la labor… jajaja… h0stia, menuco circo y ¡¡qué pvt4 gilipollez!!
En todos los pueblos hay un tonto, y en este estás tú jajajaja.
Ke vien lo pasemos