En un hito legislativo, la Junta de Castilla y León ha aprobado en su Consejo de Gobierno el tan esperado proyecto de decreto que otorga el merecido reconocimiento a las Organizaciones Profesionales Agrarias (OPAs) como entidades colaboradoras. Este paso cumplimenta el compromiso asumido por la Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural, destacando la labor crucial de estas organizaciones en la representatividad del sector y la interlocución con las administraciones.
Este reconocimiento no solo resalta la importancia de las OPAs en el panorama agrario regional, sino que también brinda una mayor estabilidad jurídica a estas entidades. Dicha estabilidad se convierte en un elemento clave en el contexto del nuevo modelo de gobernanza establecido para la Política Agraria Común (PAC).
El proyecto de decreto establece requisitos claros para obtener el estatus de entidad colaboradora, incluyendo la disponibilidad de servicios de formación y asesoramiento en temas agrarios y agroalimentarios, así como el cumplimiento de obligaciones tributarias y con la Seguridad Social. La solicitud, que puede realizarse telemáticamente o en las oficinas de registros, debe ir acompañada de una declaración responsable y un proyecto de actuación que describa las actividades propuestas.
Entre las funciones asignadas a las OPAs como entidades colaboradoras se encuentran la divulgación e información, colaboración en trámites administrativos, actuaciones en registros, facilitación de encuestas para la recogida de datos administrativos, elaboración de estudios y análisis, asesoramiento en seguros agrarios, y la realización de actividades formativas y divulgativas.
Este paso histórico no solo reconoce la labor ya realizada por las OPAs, sino que también sienta las bases para una colaboración más efectiva con la Administración. Un logro que fortalece el compromiso de la Consejería de Agricultura, Ganadería y Desarrollo Rural con el sector agrario regional.
