ESPECIAL SEMANA SANTA DE MEDINA DEL CAMPO
Entrevista a José María Magro, presidente de Nuestra Madre Santísima de la Soledad y Virgen de la Alegría
¿Cómo se introdujo en la Semana Santa de Medina del Campo?
Literalmente, en el seno materno. Tengo la suerte de decir que mi familia ha sido -y sigue siéndolo- una de las familias cofrades de toda la vida. Desde que en 1985 mi madre fuera una de las primeras mujeres en constituirse como cofradía de la Soledad y, desde mi nacimiento, he participado activamente en la cofradía. Acompañaba a mis padres a preparar los cultos y las procesiones, salía en todos los desfiles procesionales y nunca, en mis 35 años de vida, he fallado ni un año a la Semana santa de Medina.
¿Qué papel desempeña como presidente de su Cofradía?
Ser presidente de la cofradía no es tarea fácil. Aparte de todas las relaciones que se tienen que hacer con otras cofradías e instituciones, se encuentra el coordinar que todo esté en su punto. Es cierto que cada hermano mayor cuenta con unas funciones pero, al fin y al cabo, los que estamos nombrados directamente por el arzobispo somos nosotros, los presidentes. Algo muy importante y que conlleva una gran responsabilidad, sobre todo espiritual. También es cierto que en estos años de presidente hemos conseguido grandes cosas como sacar a la calle el Vía Lucis Procesional de la Alegría, o reformar el Rosario de Soledad y Esperanza. También hemos puesto en marcha el foro mariano, cuya segunda edición se celebrará el próximo mes de mayo.
¿Cuál es el día más emotivo de su Semana Santa y por qué?
A mí, personalmente, el Domingo de Resurrección, cuando se retira el velo a la Virgen de la Alegría. Ella es mi gran devoción. Pero estoy seguro que la Procesión del Encuentro de este año quedará impregnado en el corazón de todos los cofrades. Tengo la suerte de poder portar sobre mis hombros a Nuestra Madre Santísima de la Soledad y poderla llevar hasta el encuentro con su hijo. Ese momento, cuando el nazareno se arrodilla ante la Soledad, es el más bonito y el más sentido para todos los cofrades.
¿Qué simboliza para usted la Semana Santa de Medina del Campo?
La Semana santa es uno de los eventos culturales, turísticos y espirituales más importantes de nuestra villa. Yo la vivo con intensidad, casi sin descansar, intentando que todo esté correcto para poder celebrar estos sagrados misterios. También los paso en familia, pues casi todos somos cofrades en casa.
¿Cómo está preparando su cofradía el Encuentro Nacional de Cofradías de Septiembre?
Estamos esperando con ilusión. Somos varios los cofrades de la cofradía que formamos parte del voluntario cofrade y de los grupos de trabajo. Creo que el trabajo en común y bien hecho puede ser un aliciente para la vida semana santera de nuestra ciudad. Medina es villa cofrade y tenemos que demostrárselo a todos los visitantes.
¿Qué mensaje trasladaría a los hermanos cofrades y devotos de la Villa de las Ferias, relacionado con el disfrutar del recogimiento de la Semana Santa en Medina del Campo?
A los que nos ven, respeto. Respeto por lo que estamos viviendo y recreando en la calle. Que procuren no entorpecer el desarrollo de la procesión y que piensen que están siendo testigos de algo que nació en 1411, con la llegada de San Vicente Ferrer a la villa.
A los cofrades, plenitud. Que participen en la semana santa en todo lo que puedan. Que salgan a la calle a manifestar su fe. Que disfruten de los divinos oficios y de las celebraciones en el interior del templo. Y que piensen que la semana santa es el preludio de la Pascua.
