La Junta de Castilla y León da un paso firme hacia la mejora de la infraestructura vial con una inversión de 2,23 millones de euros destinada a la renovación del firme en un tramo crucial de la autovía A-601, que conecta las ciudades de Valladolid y Segovia. Este proyecto, licitado por la Consejería de Movilidad y Transformación Digital, se extenderá a lo largo de casi nueve kilómetros y abordará el tramo comprendido entre el inicio de la Autovía de Pinares en Valladolid y la salida hacia Boecillo y Tudela de Duero a través de la CL-600.
En respuesta a la necesidad de mejorar la infraestructura y garantizar la seguridad vial, la Consejería ha puesto en marcha un proceso administrativo con un plazo de ejecución de 15 meses. Las obras incluirán la aplicación de una nueva capa de mezcla bituminosa, sustituyendo la actual, con el objetivo de aumentar la durabilidad del pavimento y mejorar la funcionalidad y comodidad para los usuarios.
Este tramo, con una Intensidad Media Diaria de 17,768 vehículos, experimentará un reforzamiento de mezcla bituminosa, con fresado previo en áreas necesarias. Los tres centímetros superiores correspondientes a la rodadura serán de una mezcla drenante, mejorando las condiciones de circulación durante las lluvias. Cabe destacar que la reposición en los tramos fresados se realizará con una mezcla bituminosa semicaliente, con beneficios medioambientales al ser fabricada a menor temperatura que las convencionales.
El contrato no solo abarca mejoras en el pavimento, sino también la señalización, recrecido de bermas y la adaptación de la barrera de seguridad existente, garantizando una intervención integral para el bienestar de los conductores.
Esta iniciativa refleja el compromiso de la Consejería de Movilidad y Transformación Digital con la conservación de la Red de Carreteras, priorizando técnicas más amigables con el medio ambiente en esta obra de alta capacidad, que se suma a la estrategia de desarrollo regional.
