En estas Navidades, la tendencia eco-friendly toma fuerza: según un estudio de Wallapop, el 80 % de los españoles elegirá productos reutilizados como regalos, destacando el aumento del 33 % en la inversión en artículos de segunda mano respecto al año anterior. ¿Qué impulsa esta revolución navideña?
El ahorro económico y la conciencia medioambiental son las fuerzas motrices de este cambio en el patrón de consumo. Datos de Statista revelan que el comercio electrónico de bienes de segunda mano en España ha experimentado un crecimiento exponencial, pasando de cinco millones de euros en 2014 a cuarenta millones en 2021. Proyecciones del informe Consumer Trends 2022 sugieren que para 2030, el mercado mundial de segunda mano duplicará al de moda rápida.
¿Cómo se explican estos cambios? Expertos como Neus Soler, de los Estudios de Economía y Empresa de la UOC, y Juan Carlos Gázquez-Abad, también de la UOC, apuntan al impacto de la inflación y la subida de precios. Aunque la inflación en España ha disminuido, la sensibilidad del consumidor al costo de los artículos ha aumentado, favoreciendo el mercado de segunda mano.
Gázquez-Abad destaca que la inflación y la situación laboral, aún afectada por la crisis de la COVID-19, han elevado la sensibilidad del consumidor al precio, impulsando así la compra de segunda mano. Este fenómeno también se observa en Estados Unidos, donde el 84 % de los encuestados en el Recommerce Report 2023 de OfferUp busca ganar dinero extra, y el 94 % señala la inflación como motivo para adquirir productos de segunda mano en Navidad.
Si bien el ahorro económico lidera las motivaciones para comprar de segunda mano en España, la conciencia medioambiental va ganando terreno. Según We Are Testers, el 32 % lo hace por el cuidado del planeta, mientras que el 70 % se centra en el ahorro. En comparación, en el Reino Unido, ambos factores se equilibran más, siendo la sostenibilidad clave para el 27 % de los consumidores.
Este cambio de mentalidad es especialmente visible entre los jóvenes, generaciones Z e Y, quienes representan el 42 % del consumo de ropa de segunda mano. A diferencia de generaciones anteriores, la juventud ve en la compra de segunda mano no solo una opción económica, sino una decisión consciente y responsable.
La revolución navideña refleja no solo un cambio en las preferencias de consumo, sino un impulso hacia prácticas más sostenibles, marcando una diferencia significativa en el panorama de compras navideñas en España.
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