Villanueva de Duero regresa a los años veinte para celebrar la Feria de oficios aldeanueva

Entre el 13 y el 15 de octubre, los vecinos de Villanueva de Duero realizarán un viaje en el tiempo a la década de los años 20, para celebrar la XVII Feria de Oficios Aldeanueva. A lo largo de todo un fin de semana, la localidad recordará las costumbres, ocupaciones, vivencias, olores, juego y comidas de aquella época que vivieron sus antepasados.
La festividad ha sido presentada en la jornada de este miércoles 11 de octubre en el Palacio Pimentel de la Diputación de Valladolid, y ha contado con la presencia de la diputada de Asistencia y Cooperación a Municipios, Myriam Martín, junto al alcalde de Villanueva, Saúl Ortega y la concejala de cultura, Lorena Díez. Martín ha comentado que,
una vez más, «el reloj del tiempo se vuelve a parar en Villanueva de Duero», para recordar una parte de su historia. Así, este mismo jueves 12 los vecinos volvieron a escuchar a los Narradores de historias en la Plaza Mayor, quienes contaron relatos alrededor de la lumbre mientras se cocinan unas sopas de ajo.
Mientras, el viernes el traslado de los bueyes desde la Fuente de lavar al epicentro
del municipio, evocó la gran labor que hacían estos animales en las labores del campo y
en la vida cotidiana del pueblo. Seguidamente se inauguró la exposición “Cargas, tiros y arreos del ganado del siglo XX”.
El grueso de la programación se desarrollará entre el sábado y el domingo; unas jornadas durante las cuales Villanueva de Duero disfrutará de una gran variedad de actividades. Comenzando por el pregón y los cantos de trabajo, a cargo del grupo de música Enredabailes. «Los sonidos en Aldeanueva son los del alguacil anunciando todo
lo que acontece en la Villa, al Vocero pregonando el periódico “La Voz de Aldeanueva”, el herrero martilleando en la fragua, el carpintero diseñando un nuevo tajillo, el sonido
del chiflo del afilador que viene afilando cuchillos y navajas, y los instrumentos musicales creados por el constructor experto en los sonidos más tradicionales», ha señalado la edil.
Así, el sábado la jornada estará protagonizada por citas gastronómicas como varias
comidas tradicionales, el trillado de la mies, una tirada infantil de calva, además de la
representación de varios oficios como relojeros y herreros. Ya el domingo, tras la apertura por parte del alguacil, se llevará a cabo una ruta en bicicleta clásica por las calles de la localidad, seguido del arado y sembrado de la tierra o talleres de cocina tradicional.
Un fin de semana donde los grandes implicados en la festividad serán sus vecinos, pues son ellos mismos quienes se vuelcan año tras año para recuperar la vida de principios del siglo XX.