Redacción.-
-El sospechoso fue sorprendido realizando excavaciones ilegales y sin autorización en un enclave catalogado
La Guardia Civil, a través del Servicio de Protección de la Naturaleza (SEPRONA), ha llevado a cabo una investigación contra un individuo por su presunta implicación en un delito sobre el Patrimonio Histórico. El sujeto, identificado como PIM (39), ha sido acusado de expolio de piezas arqueológicas en un yacimiento ubicado en La Demanda.
La intervención tuvo lugar tras recibir el aviso de un particular que informó sobre la presencia sospechosa de una persona utilizando detectores de metales en un paraje de la comarca. Las patrullas de la Guardia Civil acudieron rápidamente al lugar, en el marco de las labores de vigilancia y protección del Patrimonio Histórico y Cultural de la provincia.
Una vez allí, los agentes lograron constatar la veracidad de la información al descubrir a un individuo cerca de una ermita, en un enclave arqueológico catalogado. El sospechoso estaba removiendo el terreno con una azada y portaba dos detectores de metales, uno de ellos de precisión.
Durante la inspección ocular realizada por los efectivos del SEPRONA, se encontraron evidencias de excavaciones recientes en 20 hoyos, así como en otros 15 agujeros distribuidos en seis parcelas cercanas y uno adyacente a la ermita. Todas estas áreas se encuentran ubicadas en un yacimiento arqueológico declarado oficialmente.
Posteriormente, se procedió al registro del vehículo propiedad del individuo y de sus pertenencias, donde se encontraron varias piezas metálicas que aún conservaban restos de tierra del lugar. Su apariencia indicaba un notable grado de antigüedad, lo que sugería que no se trataba de hallazgos casuales o superficiales, sino que habían sido extraídos deliberadamente del subsuelo.
Tras realizar las correspondientes investigaciones, se determinó que el individuo carecía de las autorizaciones necesarias para llevar a cabo estas excavaciones arqueológicas. Además, no había comunicado de inmediato el primer hallazgo a las autoridades competentes, sino que continuó con la búsqueda y extracción de más objetos.
Las herramientas utilizadas por el sospechoso fueron confiscadas y los objetos incautados para su posterior estudio. Este análisis fue llevado a cabo por el Museo de Burgos, dependiente del Servicio Territorial de Cultura de la Junta de Castilla y León, quien emitió un informe concluyente sobre las piezas encontradas.
Entre los objetos incautados se encontraban once monedas de cobre de diferentes aleaciones, que correspondían a monedas de curso habitual y de amplia circulación durante sus respectivas épocas. También se recuperaron tres botones y dos insignias que formaron parte de diferentes uniformes.
Debido a los hechos relatados, PIM ha sido investigado como presunto autor de un delito sobre el Patrimonio Histórico por expolio de bienes de valor histórico sin haber informado de los hallazgos. Las diligencias correspondientes han sido entregadas al Juzgado de Instrucción de Salas de los Infantes.
Cabe destacar que uno de los hallazgos más relevantes es un ‘as’ romano acuñado en el siglo I de nuestra era en la ceca de Clunia. Este objeto, posiblemente relacionado con la época del emperador Tiberio, constituye una pieza de gran interés debido a su valor histórico. El informe emitido por el Museo de Burgos revela que las diferentes piezas encontradas abarcan un amplio espacio temporal que refleja la ocupación y uso del lugar a lo largo de dos milenios, desde el siglo I hasta el siglo XX.
La Guardia Civil continuará realizando acciones de vigilancia y protección del Patrimonio Histórico y Cultural, con el objetivo de prevenir y sancionar cualquier tipo de expolio y actuación ilegal en yacimientos arqueológicos de la provincia.
