LVM.- El segundo encierro de la localidad vallisoletana de Olmedo de las fiestas en honor a San Miguel y San Jerónimo, protagonizado por toros de la ganadería salmantina Ana Isabel Vicente García, ha transcurrido este viernes de manera complicada pero afortunadamente se ha saldado sin heridos . Tres de los novillos han logrado completar el recorrido, mientras el cuarto bravo ha tenido que ser anestesiado. La carrera se ha desarrollado en un tiempo de unos 45 minutos, desde su salida en la dehesa hasta su llegada al coso olmedano.
Momentos antes de la capea, la plaza de toros vivió un momento de sobrecogimiento al llevarse a cabo un minuto de silencio en memoria de un vecino de San Sebastián que fue corneado por uno de los astados el pasado miércoles. Lamentablemente, hoy ha fallecido en el hospital debido a las graves heridas sufridas durante el suceso.
En la ciudad del Caballero los ‘encierros tradicionales al estilo de la Villa’ dan comienzo desde la dehesa, situada a unos dos kilómetros del municipio, lugar en el cual las reses son guiadas por los caballistas hacia Olmedo pasando por el mencionado mirador. En ese mismo punto, los jinetes ceden el testigo a los corredores, quienes guian a los novillos por las calles medievales de la localidad hasta la Plaza de Toros.
