La Voz.- El Toro Enmaromado de Benavente ya tiene nombre y características definidas para la edición del 2023. Será Rencoroso, perteneciente a la Ganadería Luis Algarra Número 39. Con un peso de 590 kilos y un guarismo de 8, este toro promete ser un auténtico espectáculo en las calles de la localidad.
Como manda la tradición, el alcalde de Benavente, Luciano Huerga, ha hecho corear a los asistentes que se han congregado en la plaza Mayor el clásico grito de «toro, toro, toro». En el acto de petición, han acompañado al alcalde importantes personalidades, como la Delegada del Gobierno en Castilla y León, Virginia Barcones Sanz, y la Delegada de La Junta de Castilla y León, Leticia García, entre otros.
Las Fiestas de la Veguilla de Benavente son uno de los eventos más esperados del año en la ciudad, y la elección del Toro Enmaromado es uno de los momentos más emocionantes para los vecinos y visitantes. La plaza y el Ayuntamiento se engalanan especialmente para la ocasión, y las peñas acuden con sus banderas y emblemas para enarbolarlos desde los balcones del Consistorio.
Para las salvajadas taurinas la Comarca Tierras de Medina llega hasta Puerto de Santa María.
Ya sabemos cuales son los sesudos argumentos para defender esta atrocidad:
es una tradición;
es historia, y si olvidamos la historia estamos condenados a repetirla (¿pero Manolo, a que viene eso?… yo que se ya);
es un motor socioeconomico de la región que produce mushas sinergias en el municipio y en su comarca (¿lo qué?… déjame en paz)
atrae mucho turismo (procedente de Villalpando, de Vega de Tera, de Santa Cristina de la Polvorosa,… precticamente medio pueblo de Villageriz, de 47 habitantes, viene a aca todos los años)
que si ellos la especie se extinguiría;
los comunistas flioerratas venezolas-podemitas separtaistas también atan a sus perros cuando van de paseo (en lugar de hacerlo de un árbol)