Editorial.-
En esta última semana los animales han saltado de miles de casas del país hasta el Congreso de los Diputados por una nueva ‘polémica ley’ que no ha dejado a nadie indiferente. Este jueves, nuestros políticos votaban por la Ley de Bienestar Animal, una norma impulsada por el Ministerio de Derechos Sociales y Agenda 2023 que ha salido adelante con 174 votos a favor, 7 abstenciones y 165 votos en contra. Una ajustada votación ante una ley que no ha tenido un camino fácil debido a algunas de sus medidas como la excepción de los perros de caza.
Y es que, por primera vez los extremos se han unido y han entrado en consenso, pues ni los animalistas ni los cazadores están de acuerdo. WWF España, una organización de defensa de la naturaleza, consideran que aunque es un avance, resulta incomprensible que no trate a todos los perros por igual. PACMA se ha unido a esta protesta aseverando ser “un día negro para los animales”, pues manifiestan que, tal y como está redactada, no les hace ningún favor.
Si la ley solo se centrara en los animales de caza, se podía entender el malestar de la ciudadanía. Pero es que, a partir de ahora, todo el que quiera tener un animal en casa deberá realizar un cursillo obligatorio. Y por si fuera poco, también lo deberán hacer los perros. Con ello, el ministerio pretende garantizar un trato adecuado de la mascota y, en el caso del ‘examen’ al can, considerar si es potencialmente peligroso. Suerte a todos aquellos que sus compañeros sean ladradores; igual cae más de un suspenso.
La medida no se queda aquí, sino que también habrá una lista de animales permitidos, la cual excluye a muchos de los presentes ahora mismo comparten; conejos, hamsters, periquitos, agapornis o reptiles exóticos. Como el que avisa de que tiene la cena lista, las personas que tengan cualquiera de estas mascotas en su casa deberán informar de las mismas a la autoridad medioambiental competente en la Comunidad Autónoma, porque si no las condenas pueden rondar entre los 18 y 36 años de cárcel, o la inhabilitación de entre 5 y 10 años en cuanto a vivir o trabajar con animales.
Las únicas medidas que felicitarán muchas personas será la prohibición de perros y gatos en tiendas de animales, o determinar el tiempo máximo que una mascota puede estar sola en una vivienda con el fin de evitar el abandono. Pero, ¿quién va a contabilizar este tiempo? Está claro que, con esta ley, tener una mascota en casa va a implicar demasiadas trabas, aún para aquellos dueños que los traten como un miembro más de la familia.
Partiendo de la base de que los seres humanos somos los mejores y a la vez los peores animales del planeta Tierra, he de decir que las leyes están para cumplirlas o saltárselas, en este caso, para lo segundo. Porque cuando una ley es absurda, lo que hay que hacer es la vista gorda por parte de las autoridades que la tienen que ejecutar, e ignorarla por los que la tienen que cumplir, y así todos tan felices.
Menudos legisladores tenemos, que en vez de educar, lo que pretenden con sus leyes es controlar, intentando y consiguiéndolo en muchos casos, recortar libertades de la ya acotada libertad individual que todos tenemos. A propósito, cuando uno intenta controlar la libertad de otro, en vez de educar, está manifestando un claro signo de que ignora lo que existe o que intenta dominar bajo su único punto de vista, o ambas a la vez, y dos, miren cómo ha evolucionado la religión en nuestras sociedades precisamente por controlar la libertad individual y colectiva de las personas. La política sigue el mismo camino, solo la mantiene en pie, que aquellos que se meten en política buscan el dinero rápido y fácil, creando unas tramas de estómagos agradecidos.
O espabilamos, y ponemos a estos políticos, del color que sean en su sitio, o estos nos joden la vida en beneficio única y exclusivamente suyo. Anda que no hay cosas más importantes, por ejemplo, la vida humana: violencia y agresiones sexuales, abortos, ciclistas fallecidos en la carretera,… etc. Ahí es donde hay que educar y legislar y defender la vida, y con los animales, educar, cernícalos, que sois unos cernícalos, aunque ya les gustaría a muchos ser como un cernícalo.
Pero los galgueros y cazadores pueden seguir ahorcando y abandonando o no?
Ni pueden ahora, ni podían antes. Otra cosa es que gente desalmada que hace un flaco favor a la caza lo haga. La inmensa mayoría de los cazadores cuidan de sus perros, incluso mas que esos animalistas de teclado que sacan al perro a mear o pasear a las 11 de la mañana después de 14 horas metido en un piso, atado con una correa al cuello y en ecuante mea o caga otra vez al piso. No se quien es el maltratador aquí.
Claramente los que no ahorcan ni abandonan. O tienen 10 pobres perros encerrados en 3m2 a oscuras. Esos aman a sus animales.
Cuando no les sirven ya para sus propósitos les aman aún más. Por eso la soga y la cuneta
Eso ya está castigado. Al que lo haga que lo castiguen. Yo tengo a mis perros en una finca, corren cagan y mean cuando quieren, no cuando se le antoja al animalista de salón bajar a la calle.
Pozo… tú también corres ( poco la verdad) cagas y meas cuando quieres.
Empate
Con esta ley de porquería lo que va a pasar y ya está pasando es que va a ver muchos más abandonos de animales y a algunos les quitaran a sus pequeños que son nuestros pequeños de las familias que los tienen como reyes. Es una auténtica vergüenza esta ley, y la deberían de quitar inmediatamente
Va a haber
Ni mucho menos es problema esta nueva ley. Todo lo contrario será una forma de control. Demasiado animal, sin control.