He estado escuchando el nuevo tema del grupo medinense Rise of the Shadows y, ya metido en metaleros, he seguido con Nightwish y he echado un ojo a la trayectoria musical de su anterior cantante femenina, Tarja Turunen, que sufrió acoso de pequeña por sacar buenas notas. Pero acoso de las niñas de su clase. Luego he visto un concierto de Floor Jansen (actual vocalista de Nightwish) y en un momento dado también comenta que se burlaban de ella: “¿Una chica en una banda Metal?”. Y mira, ahí está. Y no por paridad, cremallera y esas bobadas, sino porque demuestra lo que vale. Y sin Irenes Monteros gastándose millonadas en chorradas y en adoctrinar a mentes débiles para que canten tonterías sobre la madre de otros políticos.
Tarja, Floor o incluso Simone Simons (cantante de Epica) cuando gritan cantan heavy metal y para ello han empleado mucho tiempo en estudiar y conseguir que sus voces suenen de esa manera para merecer el respeto de su público.
Pero te estoy aburriendo con músicas y personas que quizás no te suenan, así que hablemos de otra cosa, por ejemplo, La Voz de Medina. Aquí han tenido redactoras, redactoros y redactores. No creo que les contratasen por paridad ni por sus gustos sexuales, sino para escribir noticias. De eso se trata: que cada uno, una o une haga su trabajo lo mejor posible. Que tengas tetas, pene o ambas cosas, es irrelevante. Pero si eres un inútil, estudia, aprende y deja de vociferar lo que otros te dicen para tener tú la voz cantante de tu propia vida.
Vaya, se me ha pasado la oleada heavy y YouTube me sugiere rock sinfónico y baladas, así que voy a pinchar a Amancio Prada para que me cante eso de “Libre te quiero como arroyo que brinca de peña en peña, pero no mía…”
Rodrigo V.
