Redacción.-
Las tecnologías de la información y de la comunicación (TIC) son herramientas indispensables en nuestras vidas. Gracias a su uso, podemos compartir los momentos a distancia con nuestra familia y amigos más lejanos.
Internet y las tecnologías tienen muchas ventajas, pero cuando no se hace un uso adecuado puede provocar aislamiento, problemas de ansiedad, afectación de la autoestima, obesidad o adicción i, por lo tanto, deteriorar el funcionamiento personal o social.
¿Por qué se caracteriza la adicción?
La adicción se caracteriza por la pérdida del control, de la dependencia, la tolerancia, el síndrome de abstinencia, los engaños, el abandono o la pérdida de interés de otras actividades.
Por un lado, se disminuye el efecto placentero, por lo que aparece la necesidad de aumentar la duración, la intensidad y la frecuencia de la conducta adictiva para conseguir el mismo efecto que al principio. El síndrome de abstinencia aparece cuando no pueden realizar la conducta adictiva y se siente un profundo malestar emocional.
Por otro lado, se empiezan a notar autoengaños y engaños a otras personas con comentarios como “no tengo problema, lo uso normal”, “puedo dejarlo cuando quiera” o “llevo unos días sin conectarme”.
¿Existe alguna estrategia de prevención?
La responsabilidad es clave en el uso de las TIC. Los padres y los educadores deben enseñar a limitar el uso de las tecnologías y a desarrollar estrategias para disminuir el tiempo que pasan ante las pantallas y, de esta manera, realizar una correcta utilización de estas.
Algunas estrategias propuestas son las siguientes:
- Decidir cuánto tiempo conectarse o jugar.
- Planificar el tiempo de estudio y el tiempo libre.
- Utilizar el móvil por necesidad, no hablar por WhatsApp cuando vamos andando.
- Priorizar hablar personalmente con las personas antes que a través de cualquier red social.
- Realizar actividad física, actividades en la naturaleza y potenciar las actividades de ocio como el cine y visitas guiadas.
