De la Fuente-. Los pueblos son lugares mágicos, donde todo sabe, huele, se ve y se siente de forma diferente. Estas son parte de las palabras que presentan la nueva obra de la escritora Tamara Santiago. Un cuento titulado “La magia de un pueblo” narra, precisamente, cuáles son los ingredientes esenciales que hacen que las calles de nuestros pequeños municipios -en este caso, concretamente Fuente el Sol- guarden valores tan relevantes y necesarios en nuestra era actual. Un cuento, por cierto, que cuenta como ilustradora con Marjoris Pirela.
¿Cuándo comienza su afición a la lectura?
Recuerdo que cuando mi hermano y yo éramos pequeñitos, mi madre nos leía un cuento todas las noches y era como el momento más esperado del día. Viene un poco todo de ahí.
¿Dónde nace su vocación por escribir?
Siempre me ha gustado escribir mis ideas, pensamientos y sentimientos sobre el papel, Desde pequeña, me enseñaron que era una buena forma de desahogarme y expresarme. Un día, empecé a escribir todos los recuerdos del pueblo en una libreta. Y así empezó todo
¿Qué le hizo profundizar en las vivencias de un niño en un pueblo?
Hubo una época en la que empecé a ser consciente, realmente, de la suerte que he tenido de pasar los veranos en el pueblo. Fue en el momento en el que me di cuenta de que muchos niños y niñas no tienen esa suerte y no pueden experimentar esos aprendizajes, experiencias y sentimientos que solo se pueden vivir en un pueblo. De algún modo, quería que, por un lado, los niños que no han tenido esa suerte, pudieran acercarse a esa realidad y, por otro lado, los que sí han tenido esa oportunidad, tuvieran un recuerdo y pudieran regresar a él a través de esta herramienta tan bonita que tenemos, que es la literatura.
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