Redacción.-
La Confederación Hidrográfica del Duero (CHD), organismo autónomo adscrito al Ministerio para la Transición Ecológica y el Reto Demográfico (MITECO), ha ejecutado en lo que va de año un presupuesto de más de 500.000 euros en diversas actuaciones para la mejora de las condiciones hidrológicas de cauces en la provincia de Valladolid.
En el marco del programa anual de mantenimiento y conservación de cauces que desarrolla el Organismo, en estos momentos se está procediendo al acondicionamiento y saneamiento de la masa ribereña a lo largo del río Hornija, en los términos municipales de La Mudarra, Peñaflor, Torrelobatón, Villasexmir, Gallegos de Hornija, Vega de Valdetronco, Marzales, Villalar, Pedrosa del Rey y San Román de Hornija. Uno de los objetivos de esta actuación, con una inversión de más de 200.000 euros, es eliminar la vegetación seca y caída en el cauce, eliminar obstrucciones y, en definitiva, mejorar la circulación del agua en este tramo del cauce.
Asimismo, el Organismo está llevando a cabo trabajos de retirada de sedimentos en el arroyo del Parral y en el arroyo de Santamaría, en las localidades de la Aldea de San Miguel, La Pedraja de Portillo y Portillo, para mejorar el desagüe del cauce y reducir el riesgo ante futuras avenidas.
También está iniciando actuaciones en el río Eresma y Adaja, en el término municipal de Matapozuelos, con objeto de retirar obstrucciones formadas por árboles caídos, ramas secas, restos de vegetación muerta y basuras que impiden la normal circulación del agua.
Por otra parte, en el arroyo del Molino, en Aldeamayor de San Martín, se ha ejecutado una retirada de fangos y sedimentos que disminuían sensiblemente la sección del cauce.
Entre las obras finalizadas en lo que va de año en la provincia de Valladolid, se encuentran las realizadas en el río Bajoz, en Castromonte, donde se ha llevado a cabo una limpieza de vegetación muerta y retirada de sedimentos y basura. También se ha ejecutado este tipo de actuación en el arroyo Madre, en Zaratán; en el río Sequillo, en Villabrágima; en el río Duero, a la altura de la localidad de Padilla de Duero; en el río Duratón, en Rábano, en el río Esgueva en Valladolid y en el cauce del arroyo Sangujero, en Hornillos de Eresma.
Estas actuaciones tienen como principal objetivo la seguridad hidrológica, tanto para las personas (esencial en la gestión del riesgo de inundaciones) como para la biodiversidad y las actividades socioeconómicas. Son medidas de restauración hidromorfológicas para recuperar riberas y meandros, restaurar y ampliar los espacios fluviales a través de soluciones basadas en la naturaleza que persiguen la renaturalización de los ríos y sus ecosistemas asociados.
