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jueves, abril 25, 2024

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Federico y los toros

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Al margen

El viento se llevó los algodones a las cinco de la tarde. Y el óxido sembró cristal y níquel a las cinco de la tarde.

Como ya sabes, esto lo escribía Federico García Lorca unas líneas antes de definir a su amigo Ignacio Sánchez Mejías de esta manera:

¡Qué gran torero en la plaza!                       

¡Qué gran serrano en la sierra!                   

¡Qué blando con las espigas!           

¡Qué duro con las espuelas!             

¡Qué tierno con el rocío!                  

¡Qué deslumbrante en la feria!                     

¡Qué tremendo con las últimas                     

banderillas de tiniebla!

Un año después empezó una guerra en la que un montón de descerebrados acabaron matándose entre ellos. Algunos ganaron aquella guerra, pero todos perdieron algo y a alguien. Libertad, poetas, familiares, vecinos, amigos y una vida más o menos tranquila. El año pasado encontré una carta en casa de mi suegro en la que un tío suyo, de 22 años, escribía desde el frente: “A ver si se van estos rojillos y se acaba todo esto”. La carta estaba junto a un recordatorio bordeado de negro en el que se veía la cara de un joven que había muerto dos meses después de aquellas líneas.

Han pasado 85 años y todavía no hemos cerrado aquel libro, no han aparecido todos los que se fueron, no encontramos a Federico ni a muchos familiares que ni siquiera llegamos a conocer. Pero ahora la guerra no es a tiros sino contra una enfermedad. O quizás dos: la covid, por un lado, y la estupidez mental de los que prohíben cosas tan absurdas como una corrida de toros por los nombres de los astados o una charlotada (que así se llamaba) porque los profesionales del toreo son enanitos (que así aparece el nombre en el cartel).

Entre ambas enfermedades se están fusilando muchos puestos de trabajo en hostelería, pequeños comercios, tauromaquia…

Alguien debería empezar a escribir poemas a tanto profesional que acabará en paro.

Rodrigo V.

2 COMENTARIOS

  1. Que triste y penoso es que en este pueblo solo importen los toros, e incluso mucho más que la pandemia….. PENOSO

  2. Solo puedo sentir asco y rechazo hacia este texto, es una autentica basura

Los comentarios están cerrados.

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