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viernes, abril 19, 2024

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La contaminaci?n del aire en Burgos y Valladolid cae a la mitad entre el 14 de marzo y el 30 de abril

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Redacción.-

Para la desescalada, Ecologistas en Acci?n propone mantener buenas pr?cticas como la compra de proximidad, el teletrabajo voluntario y la administraci?n electrúnica, rebajar el l?mite de velocidad en vías urbanas a?30 kilómetros?por hora, potenciar la movilidad activa peatonal y ciclista y garantizar el transporte público con suficiente financiaci?n.

? El informe de Ecologistas en Acci?n ?Efectos de la crisis de la COVID?19 sobre la calidad del aire urbano en Españaña?, elaborado a partir de mediciones oficiales en 26 ciudades, entre ellas Burgos y Valladolid, concluye que la reducci?n dr?stica del tráfico se sigue traduciendo en una mejora sin precedentes de la calidad del aire en las ciudades, muy por debajo del l?mite legal y la recomendaci?n de la OMS.

En primer lugar, Ecologistas en Acci?n se solidariza con todas las personas que están padeciendo la pandemia y sus consecuencias, as? como con los servicios públicos esenciales que están enfrentando la emergencia sanitaria y social.

El informe elaborado por Ecologistas en Acci?n analiza los datos oficiales de di?xido de nitr?geno (NO2) recogidos en 129 estaciones de medición, repartidas entre las 26 principales ciudades del Estado español (todas las mayores de 150.000 habitantes con más de una estación), durante los meses de marzo y abril de 2020 y de los diez años anteriores. Presenta por tanto una foto fija de la calidad del aire urbano antes y despu?s de la declaraci?n del estado de alarma y las medidas de confinamiento, actualizada a 30 de abril.

Entre sus principales conclusiones destacan:

? Desde la declaraci?n del estado de alarma el pasado 14 de marzo se ha producido una reducci?n dr?stica de los niveles de contaminaci?n atmosf?rica por NO2?en las principales ciudades españolas, reducci?n que se ha cuantificado en un 58 % de los niveles de contaminaci?n habituales en estas fechas durante la Última d?cada.

? En los casos de Burgos y Valladolid, el descenso de los niveles de contaminaci?n es respectivamente del 49 % y el 53 % de media entre sus estaciones de medición, siendo la reducci?n del NO2?del 45 % y el 51 % en las estaciones de tráfico de Plaza de los Lavaderos y Arco de Ladrillo, que en cada ciudad son las que habitualmente alcanzan niveles más elevados de este contaminante. Si bien Burgos s?lo tiene una estación urbana.

? La mejora de la calidad del aire está siendo general, tanto en los centros de las ciudades como en las periferias urbanas, al igual que son generales las medidas de limitaci?n de la circulaci?n adoptadas. Tampoco se aprecian diferencias significativas entre las diversas pr?rrogas del estado de alarma, en las que se han aplicado restricciones de diversa intensidad, si bien en Burgos y Valladolid la ca?da de la contaminaci?n ha sido algo superior en el promedio del mes de abril que en la segunda quincena de marzo.

? Los niveles de NO2?registrados durante el estado de alarma son los más bajos para los meses de marzo y abril de la Última d?cada en todas las ciudades analizadas, tambi?n en Burgos y Valladolid. Se mantienen además muy por debajo del valor l?mite legal y la gu?a anual de la Organizaci?n Mundial de la Salud (OMS), cuando en las estaciones de tráfico dicho umbral se supera frecuentemente, especialmente en el mes de marzo.

? Las precipitaciones y la inestabilidad atmosf?rica predominantes durante la primavera tambi?n han contribuido de manera importante a mejorar la calidad general del aire. Este ha sido el abril más lluvioso desde que se tienen registros. Marzo fue tambi?n muy h?medo.

? El di?xido de nitr?geno (NO2) es el contaminante t?pico emitido por los tubos de escape de los automóviles (además de por las calderas industriales y dom?sticas), por lo que su evoluci?n está directamente ligada a las emisiones del tráfico motorizado. Es esta su principal fuente en las ciudades y el principal factor que influye en la calidad del aire urbano.

? El NO2?provoca cada año en Españaña alrededor de 7.000 muertes prematuras, según el Instituto de Salud Carlos III y la Agencia Europea de Medio Ambiente, 113 de ellas en Burgos y 191 en Valladolid. Es un gas irritante que agrava las enfermedades respiratorias y merma la resistencia a las infecciones. Diversos estudios están relacionando la mortalidad de la enfermedad COVID?19 con la contaminaci?n atmosf?rica.

? Aunque no son objeto del informe, las part?culas en suspensi?n (PM10?y PM2,5) y el ozono tambi?n han disminuido de forma notable en la primera mitad de la primavera. La dr?stica reducci?n de las emisiones de ?xidos de nitr?geno (NOx), principal contaminante precursor del ozono, puede haber contribuido a esta circunstancia, junto al tiempo inestable y lluvioso.

? La crisis de la COVID?19 demuestra que la reducci?n estructural del tráfico motorizado y los cambios en las pautas de movilidad son la mejor herramienta para rebajar la contaminaci?n del aire en las ciudades, a?n teniendo en cuenta la excepcionalidad de la situación extrema que estamos viviendo.

En definitiva, esta dram?tica situación creada por la COVID?19 viene a corroborar algo en lo que viene insistiendo Ecologistas en Acci?n y toda la comunidad cient?fica: que la reducci?n del tráfico motorizado en las ciudades tiene claros efectos en la disminuci?n de la contaminaci?n, algo que a su vez supone una importante mejora de la salud pública.

Parad?jicamente, la salida de esta dura crisis podr?a conllevar el aumento de la contaminaci?n atmosf?rica por encima de los niveles precedentes. Por ello, para la desescalada en curso, Ecologistas en Acci?n propone mantener buenas pr?cticas como la compra de proximidad, el teletrabajo voluntario, la administraci?n electrúnica o el escalonamiento de horarios laborales.

De manera inmediata, debe potenciarse la movilidad activa peatonal y ciclista, cediendo más espacio para estos medios y estableciendo el l?mite de velocidad urbana en?30 kilómetros?por hora. El transporte público es esencial para la movilidad urbana, por lo que debe garantizarse su viabilidad con una ley de financiaci?n. Una vez superada la crisis, debe acelerarse la implantaci?n de zonas de bajas emisiones amplias y ambiciosas.

 

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